El Ministerio de Finanzas y Precios de Cuba
aprobó un listado de precios únicos en CUC para más de 100 productos
que se comercializan en los establecimientos de recaudación de divisas,
ante las constantes insatisfacciones de la población por la disparidad
entre los importes de un mismo artículo según la cadena de tiendas en la
que sea ofertado.
La medida incluye alimentos tales como aceite, yogur, pollo, picadillo, pastas alimenticias, purés y salsas de tomate; y bienes de aseo como jabones de lavar, detergentes y frazadas de piso.
Inés Argüelles Gutiérrez, directora general de precios del organismo, explicó al semanario Trabajadores que con esta unificación puede ocurrir que un producto aparezca con un precio inferior al que tenía en una determinada cadena, pero igual o superior al que se expendía en otra.
La funcionaria ejemplificó con el kilogramo de pechuga de pollo, cuyo precio anterior oscilaba de 4.50 a 6.50 CUC entre cadenas, y que ahora es de 4.50 para todas las entidades. Otro caso es el del detergente líquido Lavavajilla AS de 800 mililitros, que bajó unos 20 centavos —ahora cuesta 1 peso convertible—, al tener en cuenta otros precios del mercado.
La disposición está recogida legalmente en la Resolución No.214/2012, que entrará en vigor tras los cinco días hábiles que prosigan a su publicación en la Gaceta Oficial de la República de Cuba.
A nivel mundial, todos los gobiernos influyen en los precios de ciertos bienes de consumo y servicios, ya sea fijándolos directamente, mediante la regulación de los mercados y de los productos, o a través de impuestos indirectos y de subvenciones. Según analiza la experta Mercedes García Armenteros en una tesis de maestría defendida en la Facultad de Economía de la Universidad de La Habana, los precios administrados tienden a ser, por definición, aquellos que el Estado norma para ciertos mercados que suelen considerarse no competitivos, tales como los de la electricidad, el gas, el agua; u otros que se estimen convenientes por criterios técnicos y políticos.
Por otro lado, en el escenario de la economía cubana -caracterizada, como es sabido, por la existencia de un mercado interno segmentado y por la doble circulación de monedas-, es precisamente la unificación monetaria otra importante tarea que aún queda pendiente para evitar numerosas insatisfacciones de la población en la diaria actividad de adquirir los bienes y los servicios que le son necesarios. El asunto, aunque no alude a la política de precios, sino a la cambiaria, fue reconocido como fundamental entre los lineamientos aprobados en el VI Congreso del PCC para la vida económica y social de la nación en los próximos años.
Descargar el listado completo de precios únicos.
La medida incluye alimentos tales como aceite, yogur, pollo, picadillo, pastas alimenticias, purés y salsas de tomate; y bienes de aseo como jabones de lavar, detergentes y frazadas de piso.
Inés Argüelles Gutiérrez, directora general de precios del organismo, explicó al semanario Trabajadores que con esta unificación puede ocurrir que un producto aparezca con un precio inferior al que tenía en una determinada cadena, pero igual o superior al que se expendía en otra.
La funcionaria ejemplificó con el kilogramo de pechuga de pollo, cuyo precio anterior oscilaba de 4.50 a 6.50 CUC entre cadenas, y que ahora es de 4.50 para todas las entidades. Otro caso es el del detergente líquido Lavavajilla AS de 800 mililitros, que bajó unos 20 centavos —ahora cuesta 1 peso convertible—, al tener en cuenta otros precios del mercado.
La disposición está recogida legalmente en la Resolución No.214/2012, que entrará en vigor tras los cinco días hábiles que prosigan a su publicación en la Gaceta Oficial de la República de Cuba.
A nivel mundial, todos los gobiernos influyen en los precios de ciertos bienes de consumo y servicios, ya sea fijándolos directamente, mediante la regulación de los mercados y de los productos, o a través de impuestos indirectos y de subvenciones. Según analiza la experta Mercedes García Armenteros en una tesis de maestría defendida en la Facultad de Economía de la Universidad de La Habana, los precios administrados tienden a ser, por definición, aquellos que el Estado norma para ciertos mercados que suelen considerarse no competitivos, tales como los de la electricidad, el gas, el agua; u otros que se estimen convenientes por criterios técnicos y políticos.
Por otro lado, en el escenario de la economía cubana -caracterizada, como es sabido, por la existencia de un mercado interno segmentado y por la doble circulación de monedas-, es precisamente la unificación monetaria otra importante tarea que aún queda pendiente para evitar numerosas insatisfacciones de la población en la diaria actividad de adquirir los bienes y los servicios que le son necesarios. El asunto, aunque no alude a la política de precios, sino a la cambiaria, fue reconocido como fundamental entre los lineamientos aprobados en el VI Congreso del PCC para la vida económica y social de la nación en los próximos años.
Descargar el listado completo de precios únicos.
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