Por Waldo Mendiluza*
La Habana (PL) El regreso a Cuba de los cinco antiterroristas condenados a largas penas en Estados Unidos pasa por consolidar la solidaridad mundial y el reclamo de libertad en el propio país norteño, consideran activistas que defienden esa causa.
Gerardo Hernández, Fernando González, Ramón Labañino, Antonio Guerrero y René González fueron detenidos en 1998 por vigilar grupos violentos que desde Miami organizan y ejecutan acciones contra la isla; los cuatro primeros permanecen encerrados, mientras que René cumple tres años de libertad supervisada.
Más de una década de batalla legal no ha logrado poner fin a lo que una cifra superior a los 300 comités de solidaridad y dos mil asociaciones en el planeta califican de injusticia.
Denuncias de juicio amañado, apelaciones, procesos de habeas corpus y exigencias para que el Gobierno norteamericano deje de ocultar pruebas de alto valor para demostrar el estado de necesidad en la actuación de los antiterroristas forman parte de los esfuerzos por resolver el caso.
La justicia estadounidense parece no dar señales de voluntad de terminar con esta situación, por tanto la solidaridad es clave para devolver a su tierra a quienes cometieron el "delito" de proteger a sus compatriotas del terrorismo, afirmó Alicia Jrapko, coordinadora del Comité Internacional para la Libertad de Los Cinco.
En una entrevista concedida a Prensa Latina en La Habana, Jrapko destacó recientes movilizaciones en Washington DC para llamar la atención sobre el caso de Gerardo, René, Antonio, Fernando y Ramón, y demandar su retorno a Cuba.
Contactamos en el Congreso a 45 senadores y miembros de la Cámara de Representantes, distribuimos volantes y realizamos otras actividades como conferencias y una concentración frente a la Casa Blanca, en la cual participaron más de 300 personas de diferentes partes de la Unión, entre ellas pacifistas, veteranos de guerra y representantes del movimiento Occupy, expuso.
La capital estadounidense fue epicentro del 17 al 21 de abril de las jornadas Cinco días por Los Cinco, que tuvo réplicas en 44 países de América, Asia y Europa.
Se trata de una campaña que constituyó un paso importante en la lucha por lograr el regreso de Los Cinco a la isla, aunque falta mucho por hacer para romper el muro de silencio, estimó Jrapko.
Para la activista, particular valor tiene el aporte en las acciones a favor de los antiterroristas de personalidades incorporadas al reclamo de libertad, muchas de ellas en la nación norteña.
Si siguen los pronunciamientos de Danny Glover y gente tan influyente como Dolores Huerta, no van a mantenerse por mucho tiempo la desinformación y la manipulación contra Gerardo, René, Antonio, Fernando y Ramón, apuntó. De acuerdo con Jrapko, cada día de injusticia que pasa se demuestra la importancia de la solidaridad en una campaña a la cual han sumado sus voces 11 premios Nobel, intelectuales, artistas y personas de los cinco continentes.
Uno siempre espera que exista una salida jurídica, pero los hechos apuntan hacia otra dirección, de ahí la necesidad de que en todo el mundo reclamen el regreso a Cuba de esos compañeros, reiteró.
ESTIMULAR LA SOLIDARIDAD EN ESTADOS UNIDOS
Resulta clave llevar el caso al norteamericano común, lograr que más allá de visiones políticas o de sus criterios sobre Cuba coincidan con nosotros en la necesidad de hacer justicia, opinó el activista Bill Hackwell en una entrevista con Prensa Latina.
Para el fotógrafo de profesión, el éxito de tales objetivos pasa por romper el silencio de los grandes medios estadounidenses en torno a los antiterroristas.
De Los Cinco solo se habla de una manera negativa, y el calificativo de espías es recurrente, ocultando el verdadero propósito humanitario de sus actividades en territorio estadounidense, señaló en la capital cubana.
Según Hackwell, sus compatriotas deben comprender que no tiene sentido encerrar a quienes estaban combatiendo el terrorismo en un país cuyo eslogan es precisamente enfrentar ese flagelo.
Necesitamos un movimiento similar al que consiguió devolverle el niño Elián González a su padre, entonces como ahora es claro de qué lado está la razón, dijo.
De acuerdo con el activista residente en la ciudad de Oakland, California, estimula conocer la gran cantidad de personas en la Unión con algún tipo de información sobre Los Cinco.
El escenario actual es mucho mejor que el de hace unos años; cuando comenzamos en el 2002 nuestra labor solidaria casi nadie en Estados Unidos sabía del caso, aseveró.
Prueba de los avances en la divulgación de la situación de los antiterroristas cubanos fue la reciente campaña Cinco días por Los Cinco en Washington DC, de cuyas múltiples actividades el lente de Hackwell dejó constancia gráfica.
Para el fotógrafo norteamericano, resulta lógica la satisfacción por los progresos alcanzados en la divulgación del caso en territorio estadounidense, aunque resta bastante por hacer.
Eso nos da fuerzas para seguir, pero falta mucha más presión para que el gobierno y el Congreso actúen en función del regreso a Cuba de Los Cinco, estimó.
* Jefe de la Redacción Nacional de Prensa Latina.
La Habana (PL) El regreso a Cuba de los cinco antiterroristas condenados a largas penas en Estados Unidos pasa por consolidar la solidaridad mundial y el reclamo de libertad en el propio país norteño, consideran activistas que defienden esa causa.
Gerardo Hernández, Fernando González, Ramón Labañino, Antonio Guerrero y René González fueron detenidos en 1998 por vigilar grupos violentos que desde Miami organizan y ejecutan acciones contra la isla; los cuatro primeros permanecen encerrados, mientras que René cumple tres años de libertad supervisada.
Más de una década de batalla legal no ha logrado poner fin a lo que una cifra superior a los 300 comités de solidaridad y dos mil asociaciones en el planeta califican de injusticia.
Denuncias de juicio amañado, apelaciones, procesos de habeas corpus y exigencias para que el Gobierno norteamericano deje de ocultar pruebas de alto valor para demostrar el estado de necesidad en la actuación de los antiterroristas forman parte de los esfuerzos por resolver el caso.
La justicia estadounidense parece no dar señales de voluntad de terminar con esta situación, por tanto la solidaridad es clave para devolver a su tierra a quienes cometieron el "delito" de proteger a sus compatriotas del terrorismo, afirmó Alicia Jrapko, coordinadora del Comité Internacional para la Libertad de Los Cinco.
En una entrevista concedida a Prensa Latina en La Habana, Jrapko destacó recientes movilizaciones en Washington DC para llamar la atención sobre el caso de Gerardo, René, Antonio, Fernando y Ramón, y demandar su retorno a Cuba.
Contactamos en el Congreso a 45 senadores y miembros de la Cámara de Representantes, distribuimos volantes y realizamos otras actividades como conferencias y una concentración frente a la Casa Blanca, en la cual participaron más de 300 personas de diferentes partes de la Unión, entre ellas pacifistas, veteranos de guerra y representantes del movimiento Occupy, expuso.
La capital estadounidense fue epicentro del 17 al 21 de abril de las jornadas Cinco días por Los Cinco, que tuvo réplicas en 44 países de América, Asia y Europa.
Se trata de una campaña que constituyó un paso importante en la lucha por lograr el regreso de Los Cinco a la isla, aunque falta mucho por hacer para romper el muro de silencio, estimó Jrapko.
Para la activista, particular valor tiene el aporte en las acciones a favor de los antiterroristas de personalidades incorporadas al reclamo de libertad, muchas de ellas en la nación norteña.
Si siguen los pronunciamientos de Danny Glover y gente tan influyente como Dolores Huerta, no van a mantenerse por mucho tiempo la desinformación y la manipulación contra Gerardo, René, Antonio, Fernando y Ramón, apuntó. De acuerdo con Jrapko, cada día de injusticia que pasa se demuestra la importancia de la solidaridad en una campaña a la cual han sumado sus voces 11 premios Nobel, intelectuales, artistas y personas de los cinco continentes.
Uno siempre espera que exista una salida jurídica, pero los hechos apuntan hacia otra dirección, de ahí la necesidad de que en todo el mundo reclamen el regreso a Cuba de esos compañeros, reiteró.
ESTIMULAR LA SOLIDARIDAD EN ESTADOS UNIDOS
Resulta clave llevar el caso al norteamericano común, lograr que más allá de visiones políticas o de sus criterios sobre Cuba coincidan con nosotros en la necesidad de hacer justicia, opinó el activista Bill Hackwell en una entrevista con Prensa Latina.
Para el fotógrafo de profesión, el éxito de tales objetivos pasa por romper el silencio de los grandes medios estadounidenses en torno a los antiterroristas.
De Los Cinco solo se habla de una manera negativa, y el calificativo de espías es recurrente, ocultando el verdadero propósito humanitario de sus actividades en territorio estadounidense, señaló en la capital cubana.
Según Hackwell, sus compatriotas deben comprender que no tiene sentido encerrar a quienes estaban combatiendo el terrorismo en un país cuyo eslogan es precisamente enfrentar ese flagelo.
Necesitamos un movimiento similar al que consiguió devolverle el niño Elián González a su padre, entonces como ahora es claro de qué lado está la razón, dijo.
De acuerdo con el activista residente en la ciudad de Oakland, California, estimula conocer la gran cantidad de personas en la Unión con algún tipo de información sobre Los Cinco.
El escenario actual es mucho mejor que el de hace unos años; cuando comenzamos en el 2002 nuestra labor solidaria casi nadie en Estados Unidos sabía del caso, aseveró.
Prueba de los avances en la divulgación de la situación de los antiterroristas cubanos fue la reciente campaña Cinco días por Los Cinco en Washington DC, de cuyas múltiples actividades el lente de Hackwell dejó constancia gráfica.
Para el fotógrafo norteamericano, resulta lógica la satisfacción por los progresos alcanzados en la divulgación del caso en territorio estadounidense, aunque resta bastante por hacer.
Eso nos da fuerzas para seguir, pero falta mucha más presión para que el gobierno y el Congreso actúen en función del regreso a Cuba de Los Cinco, estimó.
* Jefe de la Redacción Nacional de Prensa Latina.
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